El servicio de gastroenterología del Policlínico Risso nos comparte su más reciente adquisición: El electrobisturí para procedimientos menores de ERBE VIO® 100 C con 3 módulos conectores, esta moderna unidad cuenta con tecnología de punta que nos permite extraer pólipos digestivos con el fin de realizar intervenciones de manera eficaz y segura, de esta manera, podemos ampliar la oferta de procedimientos curativos a todos nuestros pacientes.
El electrobisturí ERBE VIO® 100 C, es indispensable para extraer pólipos vía endoscópica, sin necesidad de realizar una cirugía abierta. Este procedimiento tiene como nombre: polipectomía. La polipectomía es una técnica mínimamente invasiva, este procedimiento se realiza con la ayuda de un equipo electroquirúrgico y una torre de videoendoscopia, donde se extraen los pólipos mediante la aplicación de corriente de corte y coagulación por medio de un asa de alambre. La mayoría de las veces se puede realizar de manera ambulatoria, y bajo una sedación consciente endovenosa, al emplear esta tecnología de ERBE VIO® 100C, logra que el procedimiento sea bastante seguro y tenga un costo mucho menor que la cirugía abierta.
Los pólipos pueden alojarse en el estómago, colon y esófago. Pueden ser sésiles o pediculados, y su tamaño varía de manera considerable. El objetivo es encontrar los pólipos antes de que se conviertan en cáncer, es por eso que realizar exámenes de detección de forma periódica es tan importante.
¿Quiénes son más propensos a desarrollar pólipos?
Todos pueden desarrollar pólipos en el colon, sin embargo, las personas mayores de 50 años, pacientes con sobrepeso, fumadores, aquellos que tienen antecedentes familiares de pólipos en el colon o cáncer de colon, son más propensos a padecerlo.
Los pólipos gastrointestinales se pueden desarrollar por algunos factores de riesgo como: edad, infección bacteriana en el estómago, poliposis adenomatosa familiar y el consumo de ciertos medicamentos que se usan para tratamiento del reflujo gastroesofágico.
¿Cómo se detectan los pólipos?
Los exámenes de detección se realizan con el fin de determinar la presencia de pólipos, cáncer o precáncer en las personas que no presentan ningún síntoma de la enfermedad, ya que el objetivo es detectar cualquier anomalía en su etapa inicial. Las pruebas periódicas son una de las armas más poderosas contra el cáncer.
Las pruebas que nos ayudan a detectar pólipos o principios de cáncer de estómago o colon son:
La colonoscopia
A través de una colonoscopia se detecta la presencia de pólipos colónicos. Una colonoscopia es un procedimiento en el que se usa un tubo largo, delgado y flexible con una luz y una cámara pequeña (llamado colonoscopio) para ver el interior del recto y el colon. Este examen nos permite ver tejido inflamado o irritado, úlceras, pólipos y cáncer.
Endoscopia superior
Se inserta un endoscopio (un tubo delgado y flexible con una fuente de luz y una pequeña cámara de vídeo adjunta) por la garganta. Este instrumento permite ver el revestimiento del esófago, el estómago y la primera parte del intestino delgado, si se encuentran áreas anormales, se pueden tomar biopsias para luego ser enviadas a un laboratorio, donde se examinan bajo un microscopio y se analiza si hay cáncer.
Si se encuentra la presencia de pólipos, ¿qué podemos hacer?
Es indispensable extirpar los pólipos presentes antes de que tengan la oportunidad de convertirse en cáncer, esto se logra a través de una polipectomía.
En Policlínico Risso, realizamos el procedimiento de polipectomía, utilizando la tecnología avanzada de nuestro electrobisturí de ERBE VIO® 100 C, que nos permite extirpar los pólipos y cauterizarlos a la vez, asegurando un procedimiento seguro, rápido y eficaz.